Entrevistas de trabajo: La preparación es la clave del éxito

En las entrevistas, como en la mayoría de los campos humanos en los que hay un esfuerzo, la preparación es la clave del éxito. Incluso si te sientes tremendamente orgulloso/a por no pasar apuros en las entrevistas puedas llegar a quedarte seriamente atascado/a si no la preparas adecuadamente.

Antes de continuar me gustaría hacer algunas aclaraciones sobre las entrevistas:

• Al conseguir una entrevista estamos a más de mitad de camino de conseguir un trabajo
• Los/as entrevistadores quieren que salgas exitoso/a. Realmente quieren cubrir los puestos vacantes
• Las entrevistas no son interrogatorios. Es conveniente actuar como un/a adulto/a no como una victima
• Las entrevistas nunca son perfectas. Si cometes errores, olvídalos inmediatamente
• Para tener éxito debes entender la naturaleza emocional y subjetiva de la misma. Dar buena impresión es tan importante como lo que tú digas.

 Primer Paso:

¿Qué es lo que tienes que ofrecer?

El primer paso es recordar lo que estás ofreciendo a este trabajo potencial. Puede que haga tiempo que solicitaste el trabajo pero siempre es interesante que revises lo que escribiste de ti en tu carta de presentación. Volver a ponerte al día de los detalles de tus estudios es muy importante. Es fácil olvidar la mayoría de lo que has estudiado y la empresa estará muy interesada es escuchar como hablas en profundidad de tu carrera. En el caso de trabajos científicos o de ingeniería, desde luego, puede que te hagan preguntas bastante concretas sobre algún aspecto tecnológico.

En caso de haber desempeñado algún trabajo con anterioridad, has de recordar los detalles en los proyectos que hayas estado involucrado/a, las tareas que has desarrollado y por qué acabó la relación contractual. Créeme que lo más importante es la honestidad sin descalificación de tus compañeros/as o superiores.

La empresa también está interesada en las habilidades personales que puedes aportarles. Por eso, es importante que hagas una lista de diez o doce habilidades de las cuales te sientas razonablemente feliz al hablar de ellas. Digo escribir una lista porque sino las escribes las puedes olvidar en el momento. Para cada una de estas habilidades piensa en tantos ejemplos como puedas para así mostrarle a la persona que realmente eres quien dices ser.

Por ejemplo: si te consideras a ti mismo/a una persona que le gusta trabajar en equipo, piensa en tantos ejemplos de esta habilidad como puedas. Incluye deportes de equipo, equipos de proyecto, asociaciones, equipos de trabajo en tu actual trabajo, etc. En resumen, piensa en todos esos ejemplos en los que has estado rodeado/a de gente. Quizá ya dijeras esto en tu carta de presentación pero es muy importante que tengas ejemplos de lo que hayas mencionado como habilidad.

Por Gemma Martín Naranjo | Docente de Coaching en  Vértice Business School